viernes, 19 de agosto de 2011

Entonces, en qué quedamos, quién LA votó...

Hasta hace poco más de diez días, la cómoda victoria del FPV (Frente Para la Victoria), era cuestionada en más de una reunión de amigos, colegas-docentes y en mi ambiente laboral, sea por razones de inseguridad o delincuencia, inflación creciente, "hechos de corrupción" de gran impacto mediático, entre otras razones atendibles; pero la respuesta de las urnas fue otra, totalmente distinta, hoy lo sabemos.

Entonces comienzan a surgir, al menos en mí, algunos interrogantes respecto de la conducta individual y social, respecto de lo que decimos que vamos a hacer y aquello que, en definitiva, hacemos; quiero decir: puede ser posible que muchas de esas personas que decían "de ninguna manera", hayan votado al FPV, y luego se sientan avergonzados de reconocerlo; quizá, el momento del cuarto oscuro haya sido muy dramático para los indecisos y éstos se hayan visto apurados en su decisión; tal vez, la confusión de los últimos días acerca de cómo votar, haya intimado a alguno a evitar el corte de boletas, pensando que ello implicaba un error en el sufragio; o tal vez, haya mucha, mucha gente que aún confía en este modelo y sintió, en ese último segundo de decisión en el cuarto oscuro, que debíamos intentar de nuevo, con otras caras en la provincia, en otros ministerios, pero con el mismo rostro familiar en la presidencia de la Nación.

Veo y percibo un gran enfado en personas conocidas, enojo por lo que se suponía debió ser y no fue; confío, como lo he dicho antes y sostengo, que fiscales de otros partidos estuvieron allí, en el escrutinio, y pueden dar fe de la transparencia del acto eleccionario; confío en la gendarmería que custodió todo el proceso de las primarias; pero, entonces, en quién desconfiar, si era "cantado" que los votos en contra de este modelo iban a conquistar las urnas, porque "estamos muy mal", porque "vamos en pésimo camino", porque "son todos corruptos los que están", porque... No sé más por qué, porque el resultado fue otro y eso es invariable.

Si alguien tiene una explicación acorde con lo que ahora me cuestiono, por favor, lo invito a ayudarme a comprender mejor el estado de ánimo de la sociedad en la que vivo, porque es mi intención quedarme en este país, pero entre personas que expresen libremente su opinión y entre quienes no sientan miedo ni vergüenza en decir: "Yo la voté".